En función de la hora de la operación, ingresará el día previo (si se opera a primera hora de la mañana) o el mismo día, pero siempre guardando el ayuno de 8 horas antes de la intervención.
La operación – de manera habitual- dura alrededor de 1 hora, pero el tiempo que el paciente está en la zona quirúrgica es de 2-3 horas, incluyendo preparación, tiempo anestésico, cirugía y recuperación.
Cuando vuelve el paciente a la habitación y ya está operado, ese primer día el objetivo es no tener dolor, descansar y prepararse para la recuperación.
El 1 día después de la intervención, se autoriza al paciente a sentarse y caminar con 2 muletas o con andador.
El 2 día alta al domicilio si el paciente camina con muletas y no tiene dolor.