Beneficios de la Prótesis de Rodilla

  1. Alivio del dolor: La cirugía reduce significativamente el dolor asociado con la artrosis y otras afecciones degenerativas de la rodilla.
  2. Mejora de la movilidad: Los pacientes experimentan una mejora notable en la capacidad para caminar, subir escaleras y realizar actividades diarias.
  3. Corrección de deformidades: La prótesis ayuda a corregir la alineación de la rodilla y mejora la estabilidad articular.
  4. Aumento de la calidad de vida: La eliminación del dolor y la mejora de la movilidad permiten a los pacientes retomar sus actividades y disfrutar de una vida más activa.

Proceso de tratamiento

  1. Evaluación inicial: Se realiza una evaluación detallada del paciente, incluyendo exploración, estudios de imagen y una revisión exhaustiva del historial médico.
  2. Preparación para la cirugía: El paciente recibe instrucciones específicas sobre cómo prepararse para la cirugía, que puede incluir ajustes en la medicación y recomendaciones sobre la dieta y el ejercicio.
  3. Cirugía de reemplazo de rodilla: El Dr. Saldaña Díaz realiza la cirugía utilizando técnicas avanzadas y prótesis de alta calidad para asegurar una colocación precisa y un resultado óptimo.
  4. Recuperación postoperatoria: Los pacientes suelen permanecer ingresados en el hospital durante aproximadamente 2 días para recibir cuidados postoperatorios y comenzar la rehabilitación.

Rehabilitación y recuperación

  1. Rehabilitación temprana: Inicia poco después de la cirugía y se enfoca en ejercicios suaves para mejorar la movilidad y reducir la rigidez.
  2. Fisioterapia progresiva: Un programa personalizado de fisioterapia ayuda a fortalecer los músculos alrededor de la rodilla y mejorar la flexibilidad.
  3. Seguimiento y cuidados continuos: El Dr. Saldaña Díaz realiza un seguimiento regular para evaluar el progreso del paciente y ajustar el plan de tratamiento según sea necesario.

Es un implante que se coloca en la rodilla lesionada para recuperar la movilidad y disminuir el dolor de la articulación afectada.

Dicho de esta manera parece sencillo de entender, pero no lo es tanto. 

Es una articulación.

Es una estructura especial del cuerpo humana formada por la unión entre 2 ò más huesos.

En la rodilla serían fémur, tibia y rótula.

No, estos huesos están tapizados en su parte articular por una fina capa llamado cartílago que amortigua las fuerzas que actúan sobre el hueso. 

La unión de los huesos o articulación está recubierta por una cápsula tapizada en su interior por un tejido liso llamado membrana sinovial. La membrana sinovial produce un lubricante -líquido sinovial- que reduce el roce y el desgaste de la articulación. Los ligamentos conectan un hueso al otro y estabilizan la articulación. 

A los huesos también se unen músculos y tendones que además de aumentar su estabilidad producen la fuerza necesaria para movilizarla.

Es una decisión muy importante y hay que valorarlo de manera personalizada, saber y entender cuál va a ser el proceso, la finalidad del mismo y cuándo es el mejor momento para llevarlo a cabo.

Después de entender lo que es una intervención en la que se coloca la prótesis, asegurarnos de que la indicación es correcta, se explica cómo va a ser todo el proceso, las recomendaciones que tendrá que seguir el paciente antes y después de la intervención, se firman los consentimientos informados, se solicitan analítica, electrocardiograma y radiografía de tórax para la consulta con el anestesista y se programa la intervención con una fecha específica.

En función de la hora de la operación, ingresará el día previo (si se opera a primera hora de la mañana) o el mismo día, pero siempre guardando el ayuno de 8 horas antes de la intervención.

La operación – de manera habitual- dura alrededor de 1 hora, pero el tiempo que el paciente está en la zona quirúrgica es de 2-3 horas, incluyendo preparación, tiempo anestésico, cirugía y recuperación.

Cuando vuelve el paciente a la habitación y ya está operado, ese primer día el objetivo es no tener dolor, descansar y prepararse para la recuperación.

El 1 día después de la intervención, se autoriza al paciente a sentarse y caminar con 2 muletas o con andador.

El 2 día alta al domicilio si el paciente camina con muletas y no tiene dolor.

Esta parte del proceso es casi tan importante como la cirugía. Cuando el paciente se va de alta, se vuelve a insistir en las  recomendaciones y ejercicios que tiene que realizar y ya se solicita el inicio de la fisioterapia desde el principio.

Las que sean necesarias, aunque el protocolo habitual es a las 4 semanas, 4 meses y al año durante el primer año.